Wednesday, July 17, 2013

Volver atrás es seguir adelante

Ayer viví uno de esos momentos -momentos que, en realidad, duran horas, pero que al terminar dejan una sensación fácil de concentrar en unos milisegundos- que te hacen pararte y redescubrir tu pasado. Fue una conversación con alguien (sin entrar en más detalles) con quien hacía tiempo que no hablaba. O dicho de otra forma, fue una invitación a volver a mi yo de hace un mes y revivir las dudas y emociones que me recorrían entonces. ¿Quién necesita una máquina del tiempo cuando las palabras pueden obrar la misma magia?

Admiro el poder de las dudas; al volver a ese yo tan inmerso en un mar de las mismas pude comprobar de nuevo la energía que infunden a la vida, como baterías eléctricas bipolares que estimulan -para bien y para mal- las fibras de nuestra existencia, haciéndonos vibrar. Ahora no concibo posible haber vivido este mes entre tanta estabilidad; es como un mes perdido, totalmente susceptible de olvidarse. Me siento renacer, veo como mi interior se configura de nuevo buscando la antigua y familiar sensación de balanceo entre los millones de posibles futuros que me esperan.